Antics hostals de camí ral: Hotel Quatre Nacions

dimarts, 29 de març del 2016

Hotel Quatre Nacions - Hotel Sicoris (Barcelona)

Antiga fonda de la Rambla del Centre que fou fundada pels italians Fortis i Primatesta procedents de la regió de Civiesco, situada prop del port i amb entrada per la plaça del Teatre.

1770. "Todo induce a pendar que la fecha funcional fue la de 1770, siendo los creadores los ciudadanos italianos Fortis y Primatesta. El edificio, situado siempre en el mismo lugar, La Rambla 35, fue, hasta la construcción del actual, a mediados del XIX, mucho más prosaico".

1799. 2 d'agost. "La referencia escrita más antigua que hasta ahora he conseguido es la consigna por aquel curioso impenitente y notario sin pretensiones de la realidad que fue el Baró d'Amat, quien ya lo menciona el 2 de agosto de 1799".

1802. Fonda Cuatro Naciones. (1)

1837. "Otras citas de época merecedoras de atención son las de Charles Nodier (1827) y la de Stendhal (1837)."

1838. Entre los huéspedes ilustres deben ser mencionados, pongo por caso, la pareja Sand / Chopin (1838) o Pirandello(1924).

1849. Las principales (fondas) són : Cuatro Naciones, en la Rambla ... (2)

1856. Fonda de las Cuatro Naciones. Rambla del Centro. Comidas á todas horas, habitaciones para huespedes, mesa redonda. Casa acreditada. (3)

1857. Según la guía "El Consultor", con fecha de 1857, el hotel figuraba como perteneciente a Fortis y Compañía.

1880. Con el tiempo, se registraron algunas variaciones, como por ejemplo el afrancesamiento habido hacia el 1880, cuando era denominado GRAND HOTEL ET 4 NATIONS.

1893. Factura. Gran Hotel de las Cuatro Naciones, de Fortis y Comp. Rambla del Centro. Barcelona.

1894. L'hotel que sempre havia estat en mans de la mateixa familia es va vendre a l'italià Erco Durio, també originari de Civiasco, el pare del qual havia fundat l'Hotel Oriente i regentat l'hotel Falcón.

1904. Alfons XII al Gran Hotel Quatre Nacions.

1915. "La decadencia vino aparejada con el desplazamiento del centro vital de la ciudad hacia el Eixample, aunque en 1915, mientras la Maison Dorée cobraba 16 pesetas por la pensión completa, la del 4 NACIONES costaba 12,50".

1924. "Entre los huéspedes ilustres deben ser mencionados, pongo por caso, ... Pirandello (1924)".

1927. 27 de febrer. "El cierre del GRAND HOTEL DE LAS CUATRO NACIONES mereció un comentario editorial del Diario "La Publicitat" y hasta los honores de portada. Corría el 27 de febrero de 1927. No sólo lamentaba la pérdida de tan enraizado establecimiento, sino que desgranaba los grandes momentos de su histórico pasado; de ahí que evocara el hospedaje que había dispensado ya a los distinguidos y numerosos refugiados de la revolución francesa y también señalaba que su proximidad al TEATRO PRINCIPAL le benefició de ser residencia inexcusable de los mas admirados artistas. "El Noticiero universal" también le consagró un artículo. Aquella glosa periodística que por fortuna se vería desmentida poco después, al lograr la reapertura y la continuidad, precisaba que había sido fundado bajo el nombre de HOSTAL DE LAS NACIONES. Es éste un extremo sobre el que existe una cierta confusión, y me refiero a su cualificación, porque la monografía que Kociemski consagró a la influencia de los italianos en la hostelería barcelonesa le otorgaba la distinción de haber sido "primo in Barcellona e in Europa intiera"; se refería a su condición de hotel, que no de fonda. En cambio, hay unanimidad absoluta acerca de la curiosa denominación 4 NACIONES, que no eran otras que Francia, Italia, Inglaterra y Portugal.
En aquel entonces el único establecimiento digno de competencia era La Fonda de Oro, anclada en la calle Escudellers. La casi omnipresencia de los italianos explica que en los sucesivos cambios pasara primero a manos de Ercole Durio (hijo de Francesco, dueño de los hoteles Oriente y Falcón), lo dirigiera después Luigi Crugnola y, entrado nuestro siglo, lo comprara Bussone y Maffioli.

La guía "Douze jours à Barcelone" describe minuciosamente el lujo que distinguía al hotel. Y a los barceloneses admirados comentaban también que "a l'HOTEL 4 NACIONS, tot són balcons". En vista de tanto prestigio, no es de extrañar que otro italiano, Luigi Cavagliani, inagurara la Fonda de las Cuatro Partes del Mundo, en la calle Montserrat, en el que la burda imitación se limitaba al nombre, que no a la calidad".